Capítulo 12 - Mi hoja de otoño

Te quiero y eso es lo único que puedo decirte en estos momentos. Aunque me hayas hecho mucho daño. Se que sigo sintiendo algo por ti, que quiero tirar por la basura. Pero tengo un gran problema, y eres tu. Porque no puedo olvidarte. Siempre habrá un trocito de mi corazón ocupado por ti. Ya se que tu no has sentido tanto como lo he hecho yo, pero no se que hacer con el amor que siento por ti. Es algo químico que se apodera de mi. Me gustas tanto, mi amor. Por una vez en mi vida tengo celos de mi hermano, porque te posee. Y lo más importante: le amas. 

Tu exprincipe azul, con amor.

Oh. Que bonito. Ese es mi querido Ángel. Yo tampoco lo voy a hechar de menos, nunca. Yo también le amo. También recuerdo todos los momentos que pase con él, aún me cuesta olvidarlo. Como olvidarlo. Ángel es único. Pero Ángel tiene que pasar a la historia. Porque Chris es quien me importa. Lo deje todo por él, así que ahora voy a amarlo para siempre. Él es mi hoja de otoño, aunque él no lo sepa. 

Cierro mi e-mail. Es hora de ir a por Chris y hacerle una sorpresa.

-¿Vamos?

-A donde diga mi queridísima.

-¿A donde si no? 

Nos empezamos a reír. Eramos perfectos el uno para el otro. Eso es lo que nos decían todos. Y eso que llevábamos dos días juntos. No lo entiendo. En fin, que se le va a hacer.

Le lleve a mi escondite. Al sitio que cuando me derrumbo acudo allí. Cuando quiero pensar con claridad, cuando quiero olvidar todo, donde quiero esconderme del mundo entero, en el sitio que lloro con mi verdadera cara. Si, el sitio donde voy para no morir. Para no morir por dentro.

Llegamos y le conté de que se trataba. Mi sitio especial en el mundo. Quería compartir algo muy importante para mi con él. Porque mi corazón me obligaba a hacerlo. No sabía como. Eran esos impulsos en la vida que los haces así por que si, sin ningún tipo de explicación.

-Jess, te amo. Aunque tu digas que más, es imposible. Solo llevamos dos días juntos, pero para mi es como si lleváramos la vida entera. Eres muy importante para mi, y con esto me has demostrado que tu también me quieres. Pero ya sabes que más que yo no -nos reímos a la vez-.

-Lo sabes, y sabes perfectamente que si. Y recuerda, yo soy la primera que se enamoró de ti. Y eso hace que te ame mucho más. Porque eres mi sueño hecho realidad. Y aunque tu no lo sepas. Tú si que eres mi hoja de otoño.

-Eih, me lo has robado. Eso te lo dije yo a ti. Y no me puedes copiar. Para mi significa algo. Tu solo me has copiado -me dijo serio-.

-Ya se que me lo he sacado de ti, pero yo también tengo un significado. Mucho más importante que el tuyo. Para mi significa todo el otoño pensando en ti y la querida hoja eres tu, porque tienes unas pequeñas raíces que son importantes. Las raíces de como eres. Así de genial.

-El original es mío, así que gano. Significa la hoja de otoño, que eres tu. Pareces muy sensible por fuera pero eres muy fuerte por dentro. Eres la que se ama, aunque nadie lo quiera reconocer. Eres sensible pero también eres dura para quién lo requiere. Así que esto significa lo que yo amo. A la persona que yo amo y amare. 

-Tu eres mejor aún-dije a dos centímetros de él-.

Y llegamos a los besos, a esos queridos besos. A llegar hasta él. A amarle para siempre. A sus queridas caricias. A su amor. Estamos ya quitándonos la ropa. Queríamos dar el paso. Aunque solo lleváramos dos puñeteros días sentíamos mucho. Y queríamos unirnos más. En las afueras de la ciudad. Sin que nadie nos viera. Lo íbamos a hacer. "I can't win, I can't wait. I will never win this game without you, without you. I am lost, I am vain. I will never be the same without you, without you".

Si, era mi puto móvil. Era Ángel.

-Lo siento por llamarte. Ya se que te tengo que olvidar, pero es que no puedo. No puedo vivir sin ti. Estoy todos los putos días llorando por ti. Por favor, vuelve a mis brazos.

Me alejo de Chris, intentando ponerme todo en su sitio.

-Ángel, no puedo. Amo a Chris. A mi también me duele dejarte. Pero Chris es el mejor. Me hace sentir cosas que nadie puede. Con él me siento completa. No puedo volver contigo.

Se oyen sollozos. Ángel llora por mi. Me rompe el corazón verle así. 

-Ángel, no llores por mi. Te mereces a alguien mejor que no te abandone como yo. Yo he sido una capulla. Y la que debería estar llorando sería yo por haberte hecho todo esto. Ángel, mañana te busco a la chica que necesitas amar. Mañana te la presento.

-No, Jess. Solo te necesito a ti. No quiero otra chica. Te quiero a ti. 

-Me temo que eso no va a poder ser. Estoy con Chris, y le amo a él. En serio, mañana te presento a tu alma gemela. 

-Solo iré por ti. Por si tengo la posibilidad de verte. Y de tocarte. 

-No pienses más en mi, y piensa en la chica que vas a conocer mañana. Ella si que vale la pena. Besos.

-Muchos besos a ti. Mi querida Jess. Te quiero.

-¿Qué ha pasado? -me pregunta Chris-.

-Nada, enserio. No es nada. 

-No, nada no es. Debe ser algo más importante para parar de repente. Íbamos a dar un paso más.

-Tienes razón, pero creo que pensándolo bien es demasiado pronto...

-Yo también creo que vamos demasiado rápido, pero es lo que sentimos. No lo hemos hecho para darnos el placer. Solo hemos seguido nuestros corazones. Así parezco un guarro, pero es que es así.

-Ya. A partir de ahora solo haremos lo que nuestro corazón nos pida. Si es ahora, es ahora. Si no lo es, no lo es.

-Estoy de acuerdo contigo. Ahora ven conmigo y seguiremos a nuestros corazones.